Tutorial básico de MTI (1). Introducción.

Todavía recuerdo los felices días de mi adolescencia tardía en los que me interesé por primera vez por aquella música tan curiosa que por entonces solo podía oírse adaptada en películas de temática medieval, y de forma más generalista en algunas emisoras de radio como Radio 3. Solamente en el mítico diálogos 3 de Ramón Trecet, y en algunos otros programas con vocación alternativa se le daba algo de espacio a grupos y músicos irlandeses, escoceses, o norteamericanos. Por aquel entonces mientras se bordeaba el cambio de milenio, el mainstream ya había empezado a copar todos los medios y a arrinconar sin piedad toda expresión cultural no ligada a la obtención de jugosos beneficios.

De ese modo y gracias a una curiosidad insaciable y a un espíritu muy al margen de las mayorías que estoy seguro que muchos de los lectores de este blog compartirán, me adentré poco a poco en aquellas músicas tan llamativas al oído que se hacían con violines, flautas, gaitas y acordeones. Como digo, el siglo XX agonizaba, internet empezaba a llegar a las casas y la información disponible en aquella primitiva red era escasa, aunque siempre mucho mejor que los retales que nos llegaban a través de la radio o la televisión.

Controvertido instrumento irlandés conocido como Bodhrán

Entonces habría dado mi reino por conocer a alguien que me hubiera guiado a través de lo que luego fue un viaje por completo a ciegas, o al menos habría agradecido mucho el poder encontrar información bien construida al respecto. Así que si al igual que me pasó a mí, llevas mucho tiempo con la idea de adentrarte en este mundillo y has rastreado con poco éxito la red en busca de respuestas a un buen puñado de preguntas, ¡Enhorabuena! Aquí las encontrarás. Bueno, tal vez no a todas las preguntas… Tal vez ni al 20%. Quizás incluso hagamos que te hagas muchas más, pues cada una de esas cuestiones te llevará a otra, hasta que te des cuenta de lo que realmente buscas no es el final de un camino sino el camino mismo. Ponte cómodo.

¿Pero que es la música tradicional irlandesa (MTI)?

Obviando controversias y las muchas teorías respecto al origen de las músicas tradicionales en las islas británicas, asunto que trataré en una futura entrada de este blog, creo que es necesario establecer una primera distinción entre la música tradicional y la música folk o Rebel Music. Y esta aclaración es necesaria, ya que la popularización de grupos irlandeses en los años 70 y 80 como los Dubliners o Plantxty, que tocaban en sus actuaciones temas de un tipo y de otro, lleva a mucha gente a pensar que todo forma parte de lo mismo; y aunque hay una parte de verdad en ello, porque podemos considerar a ambas como parte del folclore irlandés, la música tradicional tiene un origen mucho más antiguo y tiene como base el servir como música de baile, mientras que las rebel songs y otro tipo de canciones populares que se cantan en tabernas, bares, e incluso en masa por los aficionados en los estadios, tienen un origen y motivación política en los años 50-60.

Los Dubliners de cañas

Dicho esto, nosotros nos centraremos en la música tradicional. Esta a su vez tiene dos vertientes diferenciadas que suelen ir de la mano: el canto o singing music, y la música de baile, que suele ser más frecuente y que es la que se toca con instrumentos como el violín, la flauta, la gaita, el acordeón, el bodhrán, la mandolina, etc.  y que será la que aquí nos ocupe.

Respecto al canto hay que decir que es bastante complejo en muchas ocasiones determinar el origen de canciones que pueden tener más de 200 años, y que se suele distinguir entre el canto antiguo o Sean-nós, que suele cantarse a capela por un solo intérprete o dos a lo sumo, generalmente en inglés o en gaélico, y los lamentos o Caoineadh songs, que se interpretan también en grupo.

En este punto hay que hacer notar el hecho de que, normalmente la tradición cantada y la música de baile siempre se interpretan de forma complementaria, alternándose canciones y tunes, a pesar de que la primera sea mucho menos frecuente. Es habitual ver cómo en sesiones, conciertos, festivales, e incluso en reuniones de músicos, los largos periodos de tiempo en los que se tocan temas de baile se ven interrumpidos en un instante, y esto llama mucho la atención de aquellos que desconocen el contexto, por el silencio más absoluto en toda la sala, en un momento de sobrecogimiento colectivo o incluso de solemnidad, para a continuación dar paso a la persona que canta a capela, algo que también sucede cuando algún instrumentista toca un slow Air. Paul Brady cantando en una sesión en Longford en 1978:

La música de baile

El pequeño grupo de músicos irlandeses tocando temas animados y haciendo bailar a la concurrencia en fiestas, bodas, eventos y reuniones, es una constante en el cine de temática histórica de los últimos 70 años. No importa que en la mayoría de las ocasiones los directores sitúen a los músicos salvo en contadas y honrosas excepciones, en contextos erróneos y momentos de la historia totalmente anacrónicos como el Renacimiento, el Medievo, o el Titanic, pero la realidad es que la gran pantalla ha dado de forma más o menos fidedigna mucha difusión a la música tradicional (podrá advertir el lector que tiendo a usar la palabra «temas» para referirme a lo que en inglés se conoce como -«tunes»-; hago esto porque su uso está así extendido entre los músicos de habla castellana, probablemente debido a que la traducción literal «melodía» tiene unas connotaciones distinas en el Español de uso coloquial, y por qué no decirlo, peor acomodo al oído).

Un violinista irlandés, supervisado de cerca por su perro interpreta un reel

La música de baile irlandesa tiene algunas similitudes con otras músicas folclóricas europeas en cuanto a su estructura y su forma de interpretarse, podemos ver a simple vista, por ejemplo, cómo se subdivide en distintos ritmos como el reel, el jig, la polka, el slip jig o el hornpipe, exáctamente igual que como lo hace por ejemplo el flamenco por nombrar un caso que nos es más o menos familiar a todos los castellano-parlantes, que se estructura en lo que se llaman popularmente «Palos» (como pueden ser: la soleá, la bulería, la seguiriya, el fandango o el tanguillo). Esta disposición en subgrupos o ramas, es común en casi todas las tradiciones músicales centro-europeas y nórdicas, con las que la música irlandesa está más emparentada que con el flamenco. Cada uno de los ritmos irlandeses tiene un compás característico, aunque algunos de ellos lo comparten, y sobre todo una acentuación propia además de una cadencia determinada, que se une al hecho de que los músicos suelen interpretar unos ritmos a más velocidad que otros, básicamente debido a la propia estructura de los temas y al resultado que se busca con la interpretación y el baile.

En las sesiones, conciertos o Ceilidhs, estos ritmos se interpretan agrupados en sets (generalmente de 2, 3 o incluso más temas), siendo el reel y el jig los más populares.

Pero ante todo y por encima de lo comentado en esta entrada, la música tradicional irlandesa es un elemento de disfrute, de diversión, de celebración de la cultura y un motivo de alegría. Existen pocos fenómenos de expresión cultural en el mundo que sean capaces de transmitir la pasión por la vida como lo hace una reunión de músicos irlandeses. Ese es uno de los motivos porque los que la MTI se ha extendido por todo el globo, de forma que a día de hoy podemos encontrar sesiones en lugares tan a priori inusuales como Brasil, Finlandia, Argentina o Japón.

4 comentarios sobre “Tutorial básico de MTI (1). Introducción.

  1. Desde luego, parece un atrevimiento difundir información cuando da la impresiónde que todo está ya dicho. Enhorabuena, amenazo con seguir el blog, aprenderme canciones y hacer comentarios reiterativos; e insensatos.

Dejanos tu opinión